Proyecto de ley de libertad religiosa en Puerto Rico, también conocido como ps1 del 2 de enero de 2025
El proyecto de ley busca viabilizar y aplicar la libertad religiosa que ya está en la constitución. Se han dado casos donde se ha violentado la libertad religiosa por no haber una ley que viabilice el cómo. En 1916, el fundador del pentecostalismo puertorriqueño, Juan L. Lugo, solicitó al gobernador interino que definiera claramente el concepto de libertad religiosa. Un líder religioso fue impedido de visitar a un paciente que se estaba muriendo en un hospital, lo que demuestra la necesidad de esta ley. La ley busca proteger los derechos de todos, incluyendo a los que no se quieren vacunar. La fraternidad de concilios pentecostales (FRAPE) no apoya a ningún partido político. La iglesia no pide privilegios, sino que solicita sus derechos. La ley busca que se reconozcan los derechos del sector religioso y de base de fe. Durante la pandemia, la iglesia llevó la peor parte, y este proyecto de ley busca atemperar esos procesos. La ley busca bendecir a todos y le dice al gobierno "ayúdame a ayudarte". La ley en Puerto Rico es de una banda más ancha, lo que significa que no puede quitar los derechos que exige la ley federal, pero puede dar más. Este proyecto de ley tiene el beneficio de que a las iglesias se les reconocería toda su identidad, no solo desde el punto de vista del papel, sino también desde el punto de vista de la conciencia. Como resultado de la ausencia de esta ley, el gobierno puede establecer instrucciones que afectan la vida de la iglesia.